Guillermo Careaga, experto en animación computarizada triunfa en EEUU en la compañía DreamWorks

02 de Marzo, 2012 | Espectáculos

Guillermo Careaga, talento paraguayo que brilla en la meca del cine

Trabajó en las películas más taquilleras como "Shrek", "Kung Fu Panda" o "Madagascar", este joven talento de la animación se destaca en su labor para DreamWorks, afamada compañía fundada por Steven Spielberg.

Guillermo Careaga posa junto a Po, el rechoncho panda estrella de "Kung Fu Panda".DreamWorks

Por Richard Moreira - @ricmoreirapy | Paraguay.com


Cuando Guillermo Careaga (n. 1983, Asunción) realizó a los 15 años un viaje a Seattle y que ese primer contacto que realizó con la animación 3D en aquella ciudad del noroeste de EEUU, no se imaginaba que terminaría trabajando en DreamWorks, uno de los estudios más célebres e innovadores en la industria del cine a nivel mundial.

Todo empezó en 1998. Cuando Guillermo tenía 15 años, fue a Seattle para tomar un curso de introducción a la animación que duraría dos semanas. Esa fue la primera vez que experimentó con la animación en 3D. “Quedé enganchado” señaló el animador a Paraguay.com.

Pero toda formación tiene un inicio, y el joven buscó lugar dónde perfeccionar su arte y luego de llenar solicitudes de admisión para distintas escuelas, finalmente fue recibido en uno de los más importantes.

“En mi último año de secundaria empecé a llenar solicitudes de admisión a varias universidades en los EEUU. Me aceptaron en el Ringling School of Art and Design, en Sarasota (Florida), adonde fui en agosto del 2.002 para cursar los cuatro años de la carrera de Animación Computarizada”, recuerda.

Posteriormente, varias empresas dedicadas al rubro enviaron representantes a Ringling para reclutar nuevos talentos. “Ellos fueron a mirar nuestros cortos animados y posiblemente entrevistar a candidatos. Fue así como me entrevisté con gente de DreamWorks. A la semana me llaman y me ofrecen un contrato para trabajar con ellos en el estudio de Redwood City, en el norte de California.

Con mucho gusto acepté y es ahí donde estoy hasta ahora” explica Careaga.

Dijo sentirse un bendecido y un privilegiado por trabajar en DreamWorks, la compañía que fuera fundada, entre otros, por Steven Spielberg, el gran realizador de joyas del cine como “Tiburón”, “Indiana Jones”, “La Lista de Schindler”, entre otros. “Estoy trabajando con animadores legendarios que aportaron sus talentos para películas como el Rey León, Aladino, La Bella y la Bestia, entre otras” recuerda el animador.

Los entrañables Melman (la jirafa), Alex (el león), Marty (la cebra) y Gloria (la hipopótamo), personajes centrales de Madagascar, volverán muy pronto a sus andanzas, esta vez en Europa.DreamWorks.

Comentó que al principio trabajar con los profesionales que habían hecho verdaderas joyas fue “muy intimidante” porque era un novato delante de gente que ya estaba trabajando en la industria de la animación por años. “Sentía mucha inseguridad al compararme constantemente con ellos. Grata fue mi sorpresa cuando descubrí que todos eran formidables y estaban dispuestos a ayudarme a mejorar. Fue así como la gente que creó las películas que me inspiraron a ser un animador, fue la misma gente que me ayudó a mejorar”, recuerda con admiración.

De esta forma, Careaga realizó trabajos para películas como “Shrek Tercero”, “Kung Fu Panda”, “Madagascar 2”, “Monstruos contra Alienígenas” o “Megamind”. Actualmente trabaja para la tercera entrega de Madagascar (Europe’s Most Wanted), que se estrenará en junio de 2012.
Sobre la motivación que implica trabajar en DreamWorks aseguró que “es un placer, no solamente porque es un estudio con mucha gente talentosa sino porque siempre están sacando algo nuevo. Cada película ofrece un estilo diferente, una historia única. Nuestro desafío como animadores es darle una personalidad específica y original a cada personaje, teniendo en cuenta el tono y el estilo del guión. Es así como cada película presenta oportunidades para aprender un montón y desarrollar nuestra creatividad e imaginación” recalcó el joven compatriota.

Consultado sobre cuáles son sus objetivos luego de 6 años trabajando en la élite del cine de animación aseguró que es “seguir creciendo y mejorar mis destrezas. “Una de las áreas en la cual tengo todavía mucho que aprender es la actuación. Es decir, interiorizarse con el personaje, entender sus motivaciones, pensamientos, personalidad, etc. Es todo un desafío para mí poder concebir actuaciones que sean genuinas, originales y entretenidas. Eso conlleva mucha práctica y también el desarrollo de una observación critica”, sostuvo.

El animador

En los últimos años, la industria del cine se ha volcado a las películas de animación y su auge en Hollywood, así como en el resto del mundo, ha abierto un debate de si el animador es un artista con todas letras o es un simple operador. Sobre el punto, Guillermo Careaga aclaró su pensamiento.

“El animador es un artista. Al animar, uno toma decisiones creativas y estéticas que el software no tiene la capacidad de computar. Mucho menos cuando se trata de conceptos abstractos. Por ejemplo, cuando estamos mostrando nuestras tomas al director, solemos hablar acerca de las emociones del personaje, de sus pensamientos, de su actitud. El director nos suele decir cosas como, ‘Este personaje está enojado pero en el fondo se siente herido. Su actuación debe reflejar ese conflicto emocional’.

Entonces nosotros como animadores tenemos que idear maneras en las cuales el personaje pueda manifestar físicamente esa realidad interior.  Estas son ideas totalmente subjetivas y abstractas que la computadora (por lo menos hasta ahora) no puede procesar” asegura Careaga.

Sitio web de DreamWorks, donde se reseña todo lo que produce y producirá la compañía fundada por Steven Spielberg.

Sin embargo admitió que pueden presentarse vicios o excesos de parte del animador. “Es fácil caer en la trampa de enfocarnos demasiado en el software y no en el arte de la animación. Sobre todo cuando uno recién descubre un programa, queremos probar todos los menús, experimentar con todas las opciones y apretar todos los botones. Eso es bueno y da gusto. Pero tenemos que avanzar al siguiente nivel que es la parte artística” refiere. Hace alusión a que a la par de aprender la parte técnica, también hay que enfocarse en lo que es cinematografía, desarrollo de historias, creación de personajes, movimiento, actuación, diseño, etc. “Mucha gente se queda embelesada con el software y no toma el siguiente paso” agregó.

Iniciativa solidaria y retorno a Paraguay

En la última parte de la entrevista con el animador, éste explica la iniciativa de enseñar sus conocimientos a alumnos de escasos recursos de países tan lejanos como Camboya (este de Asia). Guillermo Careaga recordó que esta experiencia fue edificante y aleccionadora.

“En el 2009 fui a Camboya a trabajar con una ONG que se llama Desarrollo de Recursos Internacional (RDI por sus siglas en ingles). Esta organización tiene un estudio de TV que crea animaciones en flash, bastante sencillas, para programas educativos infantiles. Cada corto animado ofrece una lección para los niños: el abecedario, higiene personal, cómo conseguir agua limpia, la importancia de  la familia, etc. Fue en ese estudio donde di un curso de animación por dos semanas, y fue  una experiencia increíble y muy enriquecedora”, comentó el artista paraguayo respecto a su viaje al continente asiático.

Le llamó la atención el sentido distinto que le dieron en Camboya a la animación, a diferencia del entretenimiento a la que se apunta, por ejemplo en Estados Unidos. “Estoy acostumbrado a trabajar en la animación con el enfoque de entretener a la gente. Pero en RDI comprobé que no solo puede hacer
algo divertido, sino también educativo” precisó.

Camboya es un país de escasos recursos, donde la mayoría de los niños no tiene la oportunidad de ir al colegio y aprender las materias más básicas. “RDI pone al aire dibujos animados con lecciones e información que no podrían conseguir de otra manera. Y a los chicos les encanta.  En ciertas regiones de Camboya, el suelo produce arsénico debido a un fenómeno geológico. Este químico mortal se filtra en los ríos y la gente toma el agua sin tener idea de que está contaminada. Miles de personas perdieron sus vidas debido a la ignorancia” recordó. Estos programas educativos que hacen hincapié en tomar agua potable y cómo filtrarla, está literalmente “salvando vidas”, añadió.

Guillermo aparece durante su experiencia de enseñanza en Camboya.

Basado en esta experiencia, Careaga no descarta crear animaciones similares para proyectarlas en nuestro país. Precisamente, el Paraguay, cierra la entrevista con el animador y la pregunta tiene que ver con su retorno y de cómo ve el mercado de la animación en el país y en la región.

“Nunca descarte la idea de volver a Paraguay. Mi decisión de volver no depende de si hay o no mercado en la región. Si Dios quiere que deje mi carrera acá y vuelva a mi país, que así sea. Yo no tengo problema” dijo primeramente, para luego referirse a las nuevas generaciones de jóvenes que están incursionando con capacidad e ingenio en la animación.

“Cada vez que voy a visitar veo que el ámbito audiovisual está creciendo exponencialmente. Se están produciendo más películas con talento local. Se están creando mas (y mejores) cortos animados. Y parece ser que hay cada vez más gente interesada en la animación y el cine. Espero que todo este crecimiento e interés resulte en la creación de instituciones formales donde se pueda estudiar animación y cine, para entrenar a toda la gente talentosa del Paraguay a fin de crear un mercado en la región”, concluyó.

Una muestra del trabajo de Guillermo, se exhibe a continuación. "Sugar Rush" es un trabajo enteramente suyo que presentó como parte de su tesis en Ringling School.