En el Día Mundial de la Lucha Contra el Cáncer, que se celebra este sábado, la ministra de Salud, Esperanza Martínez, anunció que se introducirá en el Paraguay la vacuna que previene el cáncer uterino.
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El cáncer de cuello uterino es uno de los principales causantes de la muerte de muchas mujeres en Paraguay.
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Al año, el Instituto Nacional del Cáncer registra 1.500 casos, de los cuales 500 corresponden al cáncer uterino, como principal causa de muerte de las mujeres. La ministra de Salud, Esperanza Martínez, anunció que este año se realizarán pruebas para conocer la efectividad de la vacuna contra el mal e incluir así desde el 2013 su uso.
“Nuestra idea es que antes de la elaboración del presupuesto 2013 podamos tener el estudio de costo-efectividad. El Comité Nacional de Expertos que lo está evaluando, con apoyo de la Organización Panamericana de la Salud, creemos que para mayo se presentará los resultados de este estudio y veremos si a partir del 2013 el Paraguay también empieza a vacunar a sus niñas, con la idea de prevenir el cáncer”, expresó durante el acto llevado a cabo esta sábado para conmemorar el Día Mundial de la Lucha Contra el Cáncer.
La actividad contó con la presencia de especialistas del área, entre los que estaba el encargado de la Red de Banco de Tumores del Unasur, Gustavo Stefanoff, quien anunció que Paraguay será incluido desde el próximo año en la citada red en la que ya se encuentran Uruguay, Argentina, Brasil, Chile, Colombia y Venezuela.
Martínez, por su parte, expresó que esta anexión permitirá tomar muestras del cáncer que padecen los paraguayos, las cuales serán destinadas a una investigación para obtener una caracterización de los cánceres que afectan a los compatriotas.
“Se toman marcadores de las personas, que dependen de la genética de cada uno, para elegir qué medicamento es mejor y qué medicamento a esa persona en particular le puede beneficiar. A veces hay medicamentos que se desarrollan en Asia que pueden no tener la misma genética de los paraguayos y de los latinoamericanos, de ahí esta propuesta”, expresó.
Finalmente, anunció que este año colocarán en agenda las normativas para el control de la comercialización de los cigarrillos, ligado al tabaquismo, como causa principal del cáncer de pulmón. “Ese es un tema pendiente que vamos a colocar este año nuevamente en la agenda parlamentaria”, indicó.
Datos importantes
Este año, la OMS y el Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer (CIIC) se centrarán en el cribado y la vacunación. El lema del 2012 es "Junto es posible". La prevención constituye la estrategia a largo plazo más eficaz para el control del cáncer.
Factores de riesgo
El tabaquismo es el factor de riesgo evitable que por sí solo provoca más muertes por cáncer en todo el mundo, ya que provoca aproximadamente el 22% de las muertes anuales por esa causa.
Otro modo importante de afrontar la lucha contra el cáncer consiste en modificar la alimentación. Existe un nexo entre el sobrepeso y la obesidad, por un lado, y muchos tipos de cáncer, como el de esófago, colon y recto, mama, endometrio y riñón, por el otro.
El consumo de alcohol es un factor de riesgo para muchos tipos de cáncer, como los de boca, faringe, laringe, esófago, hígado, colon y recto, y mama. El riesgo de cáncer aumenta con la cantidad de alcohol consumida.
Los agentes infecciosos son la causa de casi el 22% de las muertes por cáncer en los países en desarrollo y el 6% en los países industrializados.
La contaminación ambiental del aire, el agua y el suelo por productos químicos carcinógenos causa entre el 1% y el 4% de todos los casos de cáncer (CIIC/OMS, 2003).
Más de 40 agentes, mezclas y circunstancias de exposición en el ambiente laboral son cancerígenos para el hombre y están clasificados como carcinógenos ocupacionales.
Las radiaciones ionizantes son carcinogénicas para el hombre. (Fuente: MSPyBS).
4 de Febrero de 2012 15:20
Salud mejora cobertura de tratamientos contra el cáncer
Asunción, IP Paraguay.-
El director del Instituto Nacional del Cáncer, Héctor Dami, dijo que a
medida que fueron implementados mayor número de elementos para los
tratamientos contra el cáncer, la cobertura mejoró notablemente, ya que
“cuando existe la seguridad de que serán tratados con métodos de primera
línea, la población acude sin reparo a los centros”.
Dami informó que actualmente se cuenta con un mayor stock de drogas de primera línea para el tratamiento de pacientes oncológicos. Se está realizando el fortalecimiento institucional para llevar a cabo acciones que eleven la expectativa de vida de los pacientes, dijo.
El cáncer es un problema creciente en Paraguay. Los costos de atención y tratamiento se incrementan y muchas veces supera la capacidad de respuesta que pueda dar el Estado, comunica prensa del Ministerio de Salud Pública (MSP).
En este sentido, el 25 de octubre de 2011, la cartera de Salud, habilitó el Banco de Drogas Oncológicas, que se encuentra funcionando en el Instituto Nacional del Cáncer. Este banco busca reducir la mortalidad de los cánceres priorizados (prevalentes y curables) y mejorar la calidad de vida de los afectados.
Cáncer, un mal mundial
Globalmente el cáncer mata más personas por año que el sida, la tuberculosis y la malaria juntos. En Paraguay, causa el 15 por ciento de las muertes.
A nivel mundial se visualiza que más de la mitad de los 12,4 millones de casos estimados y dos tercios de los 7,6 millones de muertes por cáncer ocurren en países de baja y mediana renta.
Cáncer de cuello uterino y próstata son los predominantes en Paraguay
Asunción, IP Paraguay.-
Según el Instituto Nacional del Cáncer dependiente del Ministerio de
Salud Pública, los cánceres más frecuentes registrados a nivel país son
de cuello uterino y mama, en la mujer; y de pulmón y próstata, en el
hombre.
Muy próximos a esto se encuentran los del tipo colo-rectal, e intestino grueso y recto.
En Paraguay, el cáncer constituye la segunda causa de muerte, después de las enfermedades cardiovasculares.
El Instituto Nacional del Cáncer registra unos 1500 casos de cáncer por año, cifra que ha crecido en los últimos años debido al aumento en la demanda.
Autoridades sanitarias aducen que solo en la franja femenina, anualmente se observan 500 casos de cáncer de cuello uterino y 300 de mama.
Argumentan que con un diagnóstico precoz estos tipos de cánceres son fácilmente curables.
El Instituto Nacional del Cáncer actualmente dispone de drogas de primera línea, hecho que ha generado el incremento de pacientes en el citado servicio asistencial.
El cáncer se produce dentro de una franja etaria de entre 50 a 60 años. A mayor expectativa de vida, mayor posibilidad de contraer cáncer; esto se encuentra explicado en el marco de un fenómeno al que se denomina la transición epidemiológica, que es lo que estamos teniendo en el país, refiere el boletín de prensa de la cartera sanitaria.
Antiguamente el país estaba compuesto de una franja infantil y juvenil, con pocos ancianos. Señalan que a medida que aumenta la población de ancianos, aumenta el riesgo de contraer cáncer.
El Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social, a través del Instituto Nacional del Cáncer ofrece una atención integral a pacientes oncológicos, que incluye el diagnóstico: tratamiento, rehabilitación y curación, y provisión de fármacos oncológicos sin costo alguno.
| 4 DE FEBRERO: DÍA MUNDIAL CONTRA EL CÁNCER | 04/02/2012 06:38:00 |
Joven paraguaya, testimonio de lucha y victoria frente al cáncer
Asunción, IP Paraguay.-
Ana Ríos era una joven paraguaya con una vida entre el trabajo, los
estudios, el deporte, la familia y los amigos. A sus 32 años, no
imaginaba el cambio en su vida al ser diagnosticada de cáncer. Ana
cuenta su lucha, y con convicción, tras nueve meses de intenso
enfrentamiento, demuestra y dice que el cáncer es una "enfermedad
difícil, pero se cura". Ofrecemos este testimonio por el Día Mundial
contra el Cáncer que se celebra el 4 de febrero.
Ana fue diagnosticada de cáncer del ovario y de mediastino en mayo de 2011, tras someterse a una "simple cirugía de protocolo", cuenta.
A pesar de que en el momento inmediato el sentimiento de que "todo terminó" rondaba por sus pensamientos, se dio cuenta y se propuso que la enfermedad no la iba a vencer.
Ese valor se manifestaba todas las noches cuando daba gracias a Dios por la salud, por más enferma que ella pudiera estar. Tal era la fortaleza mental de Ana, que decía que ella estaba atravesando solamente un tratamiento para mejorar su salud. "A mí me ayudó no sentirme enferma, muy pocas veces dije que estoy enferma", dijo.
Cada una de las quince sesiones de quimioterapia a las que se sometió, eran solamente "inyecciones de vida", como ella las llamaba, al comunicarle a sus amigos del proceso a través de las redes sociales.
Llegaron así momentos sumamente complicados. El cambio por el que se sometía su cuerpo a causa de todos los medicamentos, fue algo muy impactante. Verse sin cabello, sin cejas ni pestañas fue uno de los episodios más difíciles.
Al principio, saber que un primo suyo había fallecido recientemente tras una lucha de tres años contra el cáncer, y meses después enterarse ella que tenía la enfermedad, fue doloroso. Después este primo, se convirtió en un ejemplo de fortaleza para ella, por la cantidad de años que peleó contra la enfermedad.
En vez de cuestionar por qué se enfermó ella, que era una persona de vida sana, joven, dedicarse a la natación y al remo, Ana se decía que su cuerpo estaba lo suficientemente sano y menos contaminado que el de una persona sedentaria como para enfrentar la enfermedad.
Ella tenía células cancerígenas de nacimiento. "En algún momento podía explotar, pero no era algo que yo busqué, como un cáncer de pulmón con los fumadores, ellos están más expuestos", cuenta.
Eso no la frenó ni debilitó su lucha, a pesar de tener momentos de quiebre, que generalmente compartía con su hermano. "Otra motivación muy grande fue mi sobrinito que me decía, tía ya quiero que te crezca el pelo", cuenta con mucha emoción.
Muchos cambios producen los medicamentos, pero dentro de todo, Ana se dio cuenta que algunas de las consecuencias más comunes como tener un sabor metálico en la boca o tener la boca llena de llagas, no le pasaban solamente a ella.
Una de las preocupaciones que más atacaba a Ana era que todo el proceso iba a ser sumamente costoso, y que en algún momento iba a tocar fondo. Sus padres la tranquilizaron en ese aspecto, diciéndole que de donde sea sacarían el dinero.
Sus amigos y compañeros de trabajo, fueron claves para sobrellevar este tiempo, primeramente porque la acompañaron en todo momento y la animaban, y porque también colaboraron en el costo del tratamiento.
A pesar de la quimioterapia y los medicamentos, Ana trataba de ir al trabajo siempre, en la medida de sus posibilidades, o hacía el trabajo desde su casa. Tampoco dejó de reunirse con sus amigos, es decir trató de llevar su vida lo más normal posible a pesar de la infinidad de dificultades.
Sistema público limitado
Ana pidió en su empresa el seguro médico en el Instituo de Previsión Social (IPS), ni bien se enteró de su enfermedad para ver si accedía por lo menos a algún medicamento. "Yo necesitaba seis meses de aporte para poder acceder a esos servicios. Después te das cuenta que IPS (seguridad social) tampoco te puede ayudar en muchas cosas", cuenta.
En otra ocasión, fue al Instituto Nacional de Cáncer, donde se encontró con la sorpresa de que no había suficientes médicos para el volumen de pacientes, que cada vez se incrementaba más. "Había como uno o dos doctores que tenían que atender a toda la gente", relató.
Cada vez hay más casos de cáncer, y nuestro sistema público es muy limitado, no está preparado, indicó Ana. Los medicamentos son muy costosos, entonces como es muy difícil conseguir acá, te vas al extranjero si se puede, lamentó la joven.
Vencer la enfermedad
Las últimas dos sesiones fueron otro episodio bastante difícil para Ana. Su cuerpo ya no toleraba tantos químicos, entonces vomitaba. En esos momentos, pensaba solamente que "el mal se puede ir, por más de que duela".
Nueve meses después, va a San Pablo, Brasil, con su madre a continuar el tratamiento. Allí, el médico le dice: Ana, nunca más quimio. "Yo no entendía lo que estaba pasando, y me dijo: estás curada. Yo no podía creer", cuenta.
Con una felicidad inmensa, llamó rápidamente a su papá que estaba en Paraguay y compartió su alegría con sus amigos a través de Internet. "Ese día me quedé hablando con todo el mundo hasta no sé qué hora", relata con una amplia sonrisa en su rostro y secando de a poco sus lágrimas.
"Yo siempre dije que me iba a curar, pero no pensé que sería tan rápido", reconoce. Este martes, se someterá a una última operación de protocolo, para poder extraer los órganos afectados, como un procedimiento de prevención.
Ana sabe que esta operación no será nada comparada con las tantas y dolorosas sesiones de quimioterapia a las que se sometió, todos los medicamentos que consumió, los cambios por los que pasó. Solamente piensa en que es la parte final que le devolverá por completo la vida que tenía.
Las luchas con uno mismo, con la enfermedad, con los cambios, todo eso fue posible de enfrentar gracias al apoyo de sus seres queridos y la fortaleza personal de Ana. Hoy, espera estar completamente recuperada para invertir parte de su tiempo motivando a otras personas afectadas por la enfermedad, mediante su testimonio.
Ana Ríos es uno de los miles de casos de paraguayos que luchan con esta enfermedad que cada vez se van notificando más. Con un sistema limitado de salud, las posibilidades de vencer el cáncer se reducen, perdiendo a veces vidas que eran posibles salvar.
Grande!!! Daniel VH
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