El torneo fue organizado en forma conjunta por la Federación Paraguaya y la Federación Amambaiense de Fútbol de Salón y avalado por la Asociación Mundial de Futsal (AMF). Tuvo la participación de seis países: Paraguay, Colombia, Argentina, Chile, Uruguay y Brasil.
El partido final fue dramático, con un Paraguay que necesitaba ganar sí o sí para quedarse con el título. En cambio, Colombia sólo precisaba un empate para la consagración atendiendo a su mejor promedio de diferencia de goles (+2).
Todo parecía que los colombianos se quedaban con el título a falta de 1'37'' para la conclusión del partido. En un ataque paraguayo, el jugador colombiano Santiago Zapata (ya descalificado) ingresó imprevistamente a la cancha e impidió un inminente gol de la selección compatriota, hecho que produjo intercambios de golpes por parte de jugadores e integrantes del banco de ambos equipos, pero la peor parte se llevó el jugador cafetero Jhon Paya, quien recibió un corte en la cabeza que le produjo un sangrado.
La situación fue controlada por las fuerzas del orden y al final los árbitros, el argentino Javier Petrino y la brasileña Veronildes Ferreyra, decidieron reanudar el juego dando un tiro penal a Paraguay, por la acción desleal de Zapata. Faltaban 1'37'' en ese momento y Danilo Quintana echó por tierra la magnífica oportunidad que tuvo Paraguay para pasar al frente, cuando su tiro fue atajado por el arquero colombiano Óscar Devia.
Parecía que el título se esfumaba de la mano paraguaya, con un público que quedó con desazón por la desafortunada acción de Quintana. Sin embargo, Paraguay no se dio por vencido y con dos goles sucesivos, uno de Carlos Pino y otro de Fabio Basualdo, en un lapso de siete segundos (19'53'' y 19'58''), cambió la historia, lo que hizo delirar al público pedrojuanino. Paraguay así consumaba un nuevo título sudamericano en el rico historial del fútbol de salón de nuestro país.
Ricardo Madrid, goleador del Sudamericano con 17 anotaciones, abrió el marcador a favor de Colombia a los 10'39'' del primer tiempo, pero Alejandro Brítez puso la paridad para Paraguay a los 12'50'' de la misma fracción. En la segunda etapa, Carlos Pino a los 19'53'' y Fabio Basualdo a los 19'58'' hicieron otros dos goles para Paraguay, que terminó ganando 3-1.
Brasil quedó en tercer lugar tras vencer a Uruguay por 5 a 3.
25 de Septiembre de 2011 16:50
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