Una década bastó para que Paraguay se codee con las grandes potencias mundiales en producción de alimentos. Este significativo crecimiento está acompañado de la logística para hacerla competitiva.
Por David González
David-gonzalez@uhora.com.py
En diez años, en materia de producción de granos, Paraguay pasó de 6,4 millones de toneladas a una proyección de prácticamente 15 millones de toneladas - contabilizando 8 rubros agrícolas - para esta temporada 2013, según los pronósticos de los principales gremios de la producción.
Esto representa más de 120% de crecimiento en este periodo, en el cual Paraguay ha ganado la consideración de propios y extraños, generando alimentos para satisfacer a más de 50 millones de personas.
A la par del boom de la producción de granos, el sector privado (barcazas, transporte terrestre, silos, puertos, etc.) fue acompañando el despegue con inversiones en logística, que ayudan a Paraguay a ser competitivo, pese a ser un país mediterráneo, indicó Ulrich Bauer, presidente de la Cámara Paraguaya de Exportadores y Comercializadores de Cereales y Oleaginosas (Capeco).
César Jure, miembro de la Cámara Paraguaya de Terminales Portuarias y Puertos Privados (Caterpa), comentó que actualmente existen más de 2.000 barcazas y 200 remolcadores que son capaces de dar salida a los granos, cantidad que fue creciendo a la par de la expansión de la frontera granelera.
Además existe prácticamente una capacidad de almacenamiento en los silos en puertos de un millón de toneladas, que representa un complemento de los silos estáticos dispersos en todo el país, muchos de ellos construidos en los últimos años, cuya inversión total supera fácilmente los USD 1.000 millones.
Bauer agregó que actualmente se dispone de una capacidad de los silos estáticos en torno a las 8 millones de toneladas, cuando hace 10 años llegaba a 4 millones.
Agregó que las inversiones principalmente fueron realizadas por las multinacionales, cooperativas (Fecopord) y empresas de capital local -en ese orden- para el establecimiento de una cadena productiva eficiente que crea un impacto social en el campo.
LOS RUBROS. El rubro estrella sigue siendo la soja, pasando de un promedio de 4 millones de toneladas a volúmenes por encima de las 8 millones de toneladas. Si bien la oleaginosa sigue siendo la "niña bonita" de la agricultura paraguaya, también otros productos que han experimentado un notable crecimiento, como es el caso de los cereales: maíz, trigo y arroz.
El maíz, en este periodo, ha cuadruplicado el volumen de producción, mediante la ampliación de la superficie, sumada al ingreso de tecnología, que desembocó en el incremento paulatino de los rendimientos.
Omar Larré, miembro de la Asociación de Productores de Semillas del Paraguay (Aprosemp), dijo que para esta zafra se prevé 4 millones de toneladas de maíz.
A su vez, el trigo, prácticamente ha duplicado el volumen de producción en esta década, pasando de un promedio de 700.000 toneladas a los niveles de 1,4 millones de toneladas. A esto se suma el arroz, que ha crecido 7 veces más en este periodo, alcanzando niveles de producción por encima de las 500.000 toneladas, abasteciendo el mercado interno, abaratando costos y mejorando la calidad para el consumidor local.
TRANSPORTE. Estos 8 rubros en conjunto, con cerca de 15 millones de toneladas de granos, prácticamente generarán más de un millón de viajes para transportar los granos del campo al silo y del silo al puerto este año. También se necesitarán aproximadamente 10.000 viajes en barcazas de 1.500 toneladas de capacidad para desalijar todo este volumen de granos. Estas cifras reflejan la cantidad de empleos que demandará el sector para atender todo ese volumen de alimentos.
Para Omar Larré, aún se necesita más estructura e infraestructura para almacenar el volumen creciente de granos producidos en el país. Estimó que el maíz crecerá a un ritmo mucho más acelerado que la soja, a razón del uso de la biotecnología (transgénicos) y de la expansión agrícola, que desembocará en una producción mayor.
El éxito del agro también tiene que ver con la disparada de los precios de los commodities agrícolas y un mayor consumo en las potencias emergentes.
Fuente: ultimahora
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