Aumentar la capacitación profesional es clave para que aquellas personas que en los últimos diez años salieron de la situación de pobreza puedan tener mayor resiliencia y mantenerse en los próximos años en la clase media, donde se avecina un clima económico menos favorable, destacó ayer el economista jefe del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), George Gray Molina, en conferencia de prensa.
Indicó que sectores como el de servicios y el comercio en la última década tuvieron una alta oferta de puestos de trabajo, que ayudó a que muchas personas accedieran a un trabajo que no requiere una alta capacitación.
“Se ha alcanzado un techo laboral en el sector de servicios. Los factores de demanda están en el empresariado que exige ahora trabajadores con una mayor calificación. Esta demanda vendrá principalmente desde la industria, sectores de inversión y servicios de alta calificación”, adelantó.
Estos cargos estarán destinados para personas de clase media típica y allí es clave que los jóvenes de familias de este tipo se puedan preparar para una inserción laboral que exige ya un nivel educativo más allá del secundario y terciario.
“Las pasantías laborales son un sistema de retroalimentación que genera una ampliación del espectro de aprendizaje. Este tema de la mayor capacitación es algo que se tiene que trabajar para proyectarse a futuro”, resaltó.
clase media. El informe sobre Desarrollo Humano en América Latina que fuera publicado este año, estuvo liderado por Gray Molina y destaca en su capítulo que Paraguay ha estado, junto con Ecuador y Bolivia, entre los países que tuvo un mayor aumento en el número de familias de clase media.
Paraguay actualmente ocupa el séptimo lugar entre 18 países de la región que tiene una mayor población de este nivel social. El 38,1% de su población percibe entre USD 10 a 50 dólares por día.
Cabe señalar que este informe para calificar en un estrato social no solo observa el nivel de ingresos de la persona, sino también si aporta a algún sistema jubilatorio, si el ingreso que percibe es por un empleo formal y si cuenta con activos (ahorros, propiedades u objetos de valor) que le hagan menos vulnerable ante una situación de shock económico, como por ejemplo, la pérdida del trabajo, un desastre natural, complicación en su salud, etcétera.
El reporte también señala que Paraguay ha sido uno de los países que más han disminuido el porcentaje de personas en la pobreza extrema. Actualmente, Paraguay ocupa el quinto lugar entre los países con menos pobres extremos, con solo un 8,3% de su población en esta situación.
“Hemos aprendido a crecer económicamente en los últimos diez años, pero el reto más importante ahora es construir resiliencia en nuestros hogares para crear un patrón de desarrollo más equitativo y más sostenible en el largo plazo”, destacó.
Finalmente, el experto dijo que cada país tiene una situación particular y recomendó para el Paraguay crear una especie de “combo”, acciones concretas que permitan no frenarse en el ritmo de disminución de la pobreza.
Fuente: ultimahora
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comente aqui