BUENOS AIRES. La presidenta argentina, Cristina Fernández, le anunció a
Horacio Cartés, que su país devolverá los muebles del expresidente
paraguayo Francisco Solano López, robados durante la Guerra de la Triple
Alianza.
El mobiliario, que perteneció al héroe nacional, consta de diez
sillas, un escritorio, billit y dressoir que fueron adquiridos por
Francisco Solano López en Alemania y confiscados por la Aduana de Buenos
Aires al terminar la Guerra de la Triple Alianza.
Durante el conflicto, entre 1865 y 1870, los Ejércitos de Argentina, Brasil y Uruguay, alineados con los intereses del imperio británico en la región, aniquilaron a casi todos los hombres adultos de Paraguay, lo que afectó severamente el progreso de ese país.
Antes de la Guerra de la Triple Alianza “ustedes fueron la primera potencia industrial de América del Sur”, le dijo la presidenta Fernández a su par paraguayo durante la reunión bilateral que mantuvieron hoy en Buenos Aires.
Fernández definió a la contienda como “la masacre y el genocidio paraguayo”.
Según informó el Gobierno argentino en su sitio web, Fernández hará entrega de los muebles de Francisco Solano López (1827-1870) en su próxima visita a Paraguay, cuya fecha aún no se ha definido.
Desde 1985 los muebles forman parte de la colección de un museo de la provincia de Entre Ríos, en el noreste de Argentina, cuando fueron donados por una familia entrerriana luego de un derrotero por manos privadas durante más de un siglo.
El gobernador de Entre Ríos, Sergio Urribarri, en declaraciones a los medios ya había dado a conocer en agosto pasado la intención de restituir los bienes de Francisco Solano López “para pedir perdón desde lo simbólico por el daño que ocasionó a la gran nación paraguaya esa vergüenza nacional que fue la guerra de la Triple Alianza”.
“Nuestra decisión de realizar esta restitución de manera pública y con modalidades de ceremonia de Estado es reveladora de una voluntad política de construir la amistad de nuestros países sobre la verdad, aunque esta sea cruel y vergonzante para nosotros”, había dicho en ese momento Urribarri.
El gesto fue ampliamente valorado por funcionarios y diplomáticos paraguayos, que viajaron a la ciudad de Paraná, capital entrerriana, para constatar la autenticidad y el estado de conservación del patrimonio histórico.
Este martes, Cristina Fernández obsequió a Cartes una réplica del sable del general argentino José de San Martín, quién, en su exilio se lo entregó al brigadier argentino Juan Manuel de Rosas y éste a su vez, en 1869, legó al mariscal Francisco Solano López.
Por su parte, Cartes le entregó como obsequio a Fernández documentación sobre la mediación que aceptó Argentina el 11 de noviembre de 1859, de parte del entonces presidente paraguayo Carlos Antonio López, quién envió a Buenos Aires su hijo, el brigadier Francisco Solano López.
Durante el conflicto, entre 1865 y 1870, los Ejércitos de Argentina, Brasil y Uruguay, alineados con los intereses del imperio británico en la región, aniquilaron a casi todos los hombres adultos de Paraguay, lo que afectó severamente el progreso de ese país.
Antes de la Guerra de la Triple Alianza “ustedes fueron la primera potencia industrial de América del Sur”, le dijo la presidenta Fernández a su par paraguayo durante la reunión bilateral que mantuvieron hoy en Buenos Aires.
Fernández definió a la contienda como “la masacre y el genocidio paraguayo”.
Según informó el Gobierno argentino en su sitio web, Fernández hará entrega de los muebles de Francisco Solano López (1827-1870) en su próxima visita a Paraguay, cuya fecha aún no se ha definido.
Desde 1985 los muebles forman parte de la colección de un museo de la provincia de Entre Ríos, en el noreste de Argentina, cuando fueron donados por una familia entrerriana luego de un derrotero por manos privadas durante más de un siglo.
El gobernador de Entre Ríos, Sergio Urribarri, en declaraciones a los medios ya había dado a conocer en agosto pasado la intención de restituir los bienes de Francisco Solano López “para pedir perdón desde lo simbólico por el daño que ocasionó a la gran nación paraguaya esa vergüenza nacional que fue la guerra de la Triple Alianza”.
“Nuestra decisión de realizar esta restitución de manera pública y con modalidades de ceremonia de Estado es reveladora de una voluntad política de construir la amistad de nuestros países sobre la verdad, aunque esta sea cruel y vergonzante para nosotros”, había dicho en ese momento Urribarri.
El gesto fue ampliamente valorado por funcionarios y diplomáticos paraguayos, que viajaron a la ciudad de Paraná, capital entrerriana, para constatar la autenticidad y el estado de conservación del patrimonio histórico.
Este martes, Cristina Fernández obsequió a Cartes una réplica del sable del general argentino José de San Martín, quién, en su exilio se lo entregó al brigadier argentino Juan Manuel de Rosas y éste a su vez, en 1869, legó al mariscal Francisco Solano López.
Por su parte, Cartes le entregó como obsequio a Fernández documentación sobre la mediación que aceptó Argentina el 11 de noviembre de 1859, de parte del entonces presidente paraguayo Carlos Antonio López, quién envió a Buenos Aires su hijo, el brigadier Francisco Solano López.
Fuente: ABC
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