Los envíos de carne al mercado israelí dejarían para el país USD 90 millones desde su habilitación hasta diciembre, causando un impacto positivo en la industria cárnica nacional, según los frigoríficos.
Roberto Blumenfeld, gerente general
de la firma Frigomerc SA y miembro de la Cámara Paraguaya de la Carne
(CPC), indicó que se esperan por lo menos un volumen de envíos de 4.000
toneladas mensuales, entre los 3 frigoríficos habilitados hasta el
momento.
Se espera que luego de la auditoría del servicio sanitario israelí a la pecuaria local, fijada para finales de este mes de agosto, sean habilitadas otras plantas de faena locales, que elevarían la capacidad exportadora a este destino.
Por lo menos unas 3 plantas frigoríficas locales más se sumarían a las otras tres habilitadas (Frigomerc SA, Frigochaco y Concepción) en la actualidad.
El ritmo de sacrificio de animales que tendrán por destino el mercado de Israel es interesante; sin embargo, se espera la suspensión de las actividades al llegar el 5 de setiembre, cuando empiece la época de las fiestas judías, que generará la partida del equipo de rabinato a Israel. Recién se prevé que el equipo kosher retorne en la segunda mitad de octubre para retomar las faenas, operando a plenitud para noviembre y diciembre próximos.
Blumenfeld hizo hincapié en que los precios registrados en Israel son mejores a los pagados por Rusia -el principal mercado de la carne paraguaya-, entre un 15% a 20%; sin embargo, el costo de producción para cumplir con los requerimientos del mercado israelí ascienden a USD 20 mil adicionales por mes, equiparando los niveles de ingresos en concepto de envíos de carne al mercado ruso.
Israel demanda la parte delantera del animal que necesita en las tareas de desposte, un desgrase intensivo, similar en nivel de exigencia o mayor que el mercado chileno, señaló Blumenfeld.
La demanda de mano de obra en los frigoríficos aumenta con la reapertura del mercado de Israel, atendiendo a que por lo menos se necesitan entre 27 a 30 personas adicionales para cumplir con las exigencias religiosas del mercado de Medio Oriente.
Agregó que hasta el momento, el mercado de Israel no puede recibir las menudencias bovinas; por lo tanto, los niveles de ingresos son menores, comparativamente a otros mercados que están comprando los subproductos de origen animal, que en el global generan ingresos superiores.
Las cifras
US$ 90 millones ingresarían al país en concepto de exportaciones de carne a Israel en los próximos cinco meses.
4.000 toneladas de carne bovina serían exportadas mensualmente al mercado de Israel desde agosto a diciembre.
US$ 20.000 adicionales invierte la industria para cumplir con las exigencias del mercado israelí, que tiene un método especial de faena.
Se espera que luego de la auditoría del servicio sanitario israelí a la pecuaria local, fijada para finales de este mes de agosto, sean habilitadas otras plantas de faena locales, que elevarían la capacidad exportadora a este destino.
Por lo menos unas 3 plantas frigoríficas locales más se sumarían a las otras tres habilitadas (Frigomerc SA, Frigochaco y Concepción) en la actualidad.
El ritmo de sacrificio de animales que tendrán por destino el mercado de Israel es interesante; sin embargo, se espera la suspensión de las actividades al llegar el 5 de setiembre, cuando empiece la época de las fiestas judías, que generará la partida del equipo de rabinato a Israel. Recién se prevé que el equipo kosher retorne en la segunda mitad de octubre para retomar las faenas, operando a plenitud para noviembre y diciembre próximos.
Blumenfeld hizo hincapié en que los precios registrados en Israel son mejores a los pagados por Rusia -el principal mercado de la carne paraguaya-, entre un 15% a 20%; sin embargo, el costo de producción para cumplir con los requerimientos del mercado israelí ascienden a USD 20 mil adicionales por mes, equiparando los niveles de ingresos en concepto de envíos de carne al mercado ruso.
Israel demanda la parte delantera del animal que necesita en las tareas de desposte, un desgrase intensivo, similar en nivel de exigencia o mayor que el mercado chileno, señaló Blumenfeld.
La demanda de mano de obra en los frigoríficos aumenta con la reapertura del mercado de Israel, atendiendo a que por lo menos se necesitan entre 27 a 30 personas adicionales para cumplir con las exigencias religiosas del mercado de Medio Oriente.
Agregó que hasta el momento, el mercado de Israel no puede recibir las menudencias bovinas; por lo tanto, los niveles de ingresos son menores, comparativamente a otros mercados que están comprando los subproductos de origen animal, que en el global generan ingresos superiores.
Las cifras
US$ 90 millones ingresarían al país en concepto de exportaciones de carne a Israel en los próximos cinco meses.
4.000 toneladas de carne bovina serían exportadas mensualmente al mercado de Israel desde agosto a diciembre.
US$ 20.000 adicionales invierte la industria para cumplir con las exigencias del mercado israelí, que tiene un método especial de faena.
Fuente: ultimahora
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