Hay 90.000 argentinos radicados en Paraguay

Más argentinos eligen vivir en Paraguay

Oportunidades profesionales y comerciales en Paraguay promueven la migración de argentinos, según el investigador Sebastián Bruno. 

 

Por Fátima Rodríguez

farodriguez@sd.com.py

 

 

En Argentina “paragua” y en Paraguay, “kurepi”. Los hijos de la migración histórica de paraguayos hacia el país vecino inspiró alguna vez al poeta Fernando Denis Vera.  Un crecimiento de la cantidad de argentinos en el Paraguay es un fenómeno en estudio para algunos investigadores que no dejan de señalar que muchos de los argentinos que vienen a Paraguay son hijos del exilio económico y político de medio millón de paraguayos radicados actualmente en el vecino país.  

 

Así como los paraguayos constituyen la población extranjera más grande en Argentina,  la migración argentina creció en los últimos años hacia nuestro país llegando aproximadamente a 90 mil el número de argentinos radicados en Paraguay.  

 

 

 

 

Sebastián Bruno, sociólogo, investigador del Grupo de Estudios Sociales sobre Paraguay de la Universidad de Buenos Aires. Foto: Gentileza

 

 

 

Sebastián Bruno, sociólogo, investigador del Grupo de Estudios Sociales sobre Paraguay de la Universidad de Buenos Aires y consultor independiente en nuestro país refiere algunos datos que pueden ayudar a entender este fenómeno migratorio.

 

-¿Cuántos argentinos viven actualmente en Paraguay?

 

-Esta pregunta, que es tan simple como importante, no tiene una respuesta fácil. Entre otros perjuicios de no disponer de un censo de población actualizado, está la ausencia de información sobre la inmigración en Paraguay. Ante esa situación, apelamos a la información de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH). Según esa fuente habría, en 2013, casi 90 mil argentinos en Paraguay. Como toda fuente basada en una muestra, existe un margen de error. Si nos ponemos exigentes en ese sentido, con muy poco riesgo de equivocarnos se podría afirmar que los argentinos en Paraguay son más de 72 mil y menos de 107 mil. Este cálculo que se conoce técnicamente como estimación por intervalos de confianza.

 

 

 

 

 

 

-¿Cómo podemos entender esta estimación?

 

-Más allá de las complejidades de las estimaciones, se destacan dos cuestiones. La primera refiere que la presencia Argentina en Paraguay crece “a la sombra” de la corriente principal, que es la migración paraguaya a Argentina (ver gráfico). Mientras que en 2010 el censo argentino relevó la presencia de 550 mil migrantes paraguayos; se estimaba que en Paraguay había en ese año poco más de 80 mil argentinos. En casi todos los procesos migratorios se da que ante una corriente migratoria importante, se genera una contracorriente migratoria, que en el caso de Paraguay y Argentina, adquiere las mencionadas dimensiones.

 

El otro punto, quizás el más significativo, es que probablemente los argentinos constituyan la principal presencia extranjera en Paraguay, superando a la histórica inmigración brasileña. Si bien el próximo censo confirmará (o no) este hecho, la encuesta de hogares de Paraguay está marcando esa tendencia.

 

-¿Quiénes vienen? ¿Qué nivel de formación tienen los argentinos que vienen a Paraguay?

 

-Si bien los procesos migratorios de esta magnitud son complejos de analizar, podemos focalizarnos en dos rostros de la inmigración argentina. El más importante es el que Edith Arrúa denominó en su tesis como “los hijos del retorno”, que hace referencia a hijos, nietos y parejas argentinos y argentinas que acompañan al o la migrante paraguayo en su retorno a Paraguay. Estos familiares si bien probablemente han estado en estrecho contacto con la cultura paraguaya en Argentina, pero han nacido en ese país y una buena parte de ello y ellas han cursado parte o toda su trayectoria educativa allí. Esto impacta en Paraguay, aportando sus miradas y habilidades en el ámbito laboral, comercial, cultural, etc. Más allá de este caso en particular, debe remarcarse que los inmigrantes -tomados como conjunto- implican un importante aporte a los países de destino, ya sea en términos económicos, educativos, culturales, demográficos, etc.

 

El otro rostro de la inmigración argentina está vinculado con las oportunidades profesionales y comerciales en Paraguay. Se trata de personas de una alta calificación, quienes se desarrollan en actividades ligadas a la provisión de servicios profesionales y al comercio.

 

-¿Cómo se llega a este dato?

 

-Con la información de los dos últimos censos comparables de Paraguay y Argentina se puede llegar a una de las conclusiones más importantes, que diferencia a la migración hacia ambos países. Los migrantes argentinos en Paraguay no sólo tienen un mayor nivel de instrucción que la población; sino que también tienen un perfil educativo más elevado que el promedio de la población en Argentina.

 

Se trata entonces de una inmigración con un importante componente de calificación educativa, donde más de 1 de cada 4 inmigrantes argentinos tenía estudios superiores.

 

Cabe destacar el contraste respecto de la población migrante paraguaya hacia Argentina, donde poco más del 4% tenía estudios superiores.

 

-¿Es posible que la crisis económica actual en la Argentina también constituya un estimulante para la migración argentina en Paraguay?

 

-Comparando la situación actual de Argentina con el escenario económico de 1989-1990 y 2001, quizás convenga hablar más bien de recesión. Si bien todavía no disponemos de datos que puedan vincular esta recesión con una emigración de argentinos hacia países de la región, podemos establecer algunas hipótesis para analizar. Una refiere al impacto de las restricciones a la compra de divisas, desde 2011, y la progresiva caída del peso argentino en el mercado cambiario. Con ella se ha afectado totalmente el envío de remesas por parte de los migrantes paraguayos en Argentina, casi imposibles por las vías formales como los bancos o las agencias de envío de dinero.

 

Eso pudo haber afectado en una menor emigración desde Paraguay y el retorno de quienes esperaban buscar una diferencia económica en Argentina.

 

 

 

Fuente: paraguay.com