Joven ingeniero trabaja en un prototipo de brazo biónico

PROYECTO DEL PARQUE TECNOLÓGICO ITAIPÚ – PTI

A nivel mundial una prótesis articulada para brazos está en el orden de los 150.000 dólares

 

 

 

13/09/2014

Antonio Resquín utiliza prótesis en las piernas. Las mismas fueron adquiridas en el Brasil y ahora trabaja para que se fabriquen en Paraguay.

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Antonio Resquín es un joven ingeniero electromecánico que trabaja dentro del Parque Tecnológico de Itaipú (PTI), en el desarrollo de diversos proyectos tecnológicos de energía renovable, a pesar de ser una persona con discapacidad motriz. Representando a la fundación de la binacional Itaipú, presentó ayer durante el Congreso Internacional sobre Discapacidad y Derechos Humanos, organizado por la Secretaría Nacional por los Derechos Humanos de las Personas con Discapacidad (Senadis), el proyecto para el desarrollo de prótesis a bajo costo.

El ingeniero electromecánico tiene una discapacidad física de nacimiento, no cuenta con ambas piernas, ni el brazo izquierdo. Desde hace 7 años ha pasado a ser usuario de prótesis en las extremidades inferiores. “Yo sé los costos y las dificultades que implica utilizar estas prótesis, entonces la principal barrera para que más personas puedan acceder a esta prótesis son el costo. Por ejemplo, una prótesis de brazo está como 150.000 dólares, una suma inviable para la mayoría de los paraguayos”, comentó el joven.

En ese sentido, indicó que el objetivo del proyecto desarrollado por PTI es fabricar prótesis a menor costo. Destacó que la demanda de prótesis van en aumento, ante la gran cantidad de amputaciones a consecuencia de los accidentes de tránsito. “Nuestra intención es devolverle la movilidad, sobre todo a aquellos que por una desgracia han perdido algún miembro. Entonces, el propósito de PTI es brindar un servicio social, pero desde el punto de vista tecnológico”, explicó Resquín.

Señaló que actualmente se encuentran en la fase de diseño y desarrollo del primer prototipo de un brazo que incluye el hombro, codo, muñeca y dedos articulados a con control mioeléctrico. Es decir, que se controla por medio de los músculos. Pero también se puede realizar controles con ondas cerebrales. “Hay que tener en cuenta que desarrollar este prototipo es mucho más complicado que una pierna que tiene una sola función, que es caminar. En cambio el brazo debe realizar múltiples funciones”, comentó.

Mencionó que él por ser usuario de esta tecnología facilita el desarrollo y mejoramiento de otros prototipos ejecutados por ingenieros que no tienen ninguna discapacidad.
 

 

Fuente: lanación