LLAMÓ LA ATENCIÓN POR SUS FORMAS GEOSIMÉTRICAS
Se requiere una investigación y análisis especializados para confirmar o descartar esta hipótesis
09/06/2014
(F1) Parte de la formación rocosa en el Amambay presenta similitud con excremento de animal vertebrado fosilizado, según sospechan geólogos.
Un grupo de geólogos que realizaban un estudio de campo en una visita al Parque Cerro Corá en Amambay tiene la sospecha de haberse topado con un yacimiento paleontológico, de posibles coprolitos (heces) de vertebrado (tal vez un gigante dinosaurio a juzgar por el diámetro).
Así lo indicó el geólogo Dr. Jaime Báez Prasser, que acompañó a la comitiva de estudiantes del curso de posgrado nivel máster sobre Geología del Paraguay, de la Facultad de Geografía de la Unioeste –del estado Paraná–, Brasil.
Consultado sobre qué se basan las sospechas, indicó que al grupo de geólogos les llamó la atención la forma geométrica que presentaba el montículo de piedras. “La formación tiene una forma muy simétrica, porque tienen mucho parecido a un montículo de materias fecales. Pero en primer lugar, son arenas de desierto, lo que descarta por completo cualquier otro tipo de fósil, aparentemente de un animal vertebrado muy grande”, explicó el doctor Báez Prasser.
Inmediatamente el equipo de docentes que acompañaba al grupo de alumnos se puso en contacto con especialistas en paleontología de la Secretaría Nacional de Cultura (SNC), a fin de informar del hallazgo y a la vez solicitar el estudio y análisis que confirmen o descarten las sospechas. Así también, solicitaron el rescate y cuidado de la zona, a modo que sea protegido durante la investigación.
ERA MESOZÓICA
Si bien se trata de meras presunciones, se consultó si es posible hallar este tipo de material biológico fosilizado, al especialista en paleontología Sergio Ríos, de la Dirección de Patrimonio de la SNC, respecto al reciente hallazgo del Dr. Báez Presser. Mencionó que de acuerdo a las referencias que recibió, el descubrimiento tuvo lugar en rocas de la era de los dinosaurios (Era Mesozoica). Así que en caso de confirmarse de que las estructuras descubiertas sean de origen orgánico, existirían buenas posibilidades de que el “dueño” pueda ser un dinosaurio.
“Sin embargo, considero muy prematuro realizar cualquier especulación, ya que las estructuras no muestran signos inequívocos de tratarse de coprolitos, por lo que será necesario un análisis y estudio muy detallados. Es importante aclarar que existen estructuras geológicas, llamadas concreciones, que pueden llegar a tener un aspecto similar”, explicó el técnico especialista.
Fuente: lanación
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