El Gobierno desea recuperar el casto histórico de Asunción. Foto: Secretaría de Cultura.
El Gobierno paraguayo ha recibido 28 propuestas para reformar el casco urbano de la capital, entras las que se encuentran ideas de ocho estudios españoles, siete de Paraguay y seis de Argentina, entre otros, según informó hoy la Secretaría Nacional de Cultura (SNC).
Debido a la alta participación de propuestas urbanísticas a nivel nacional e internacional, el Gobierno paraguayo decidió aumentar el plazo de recepción de proyectos hasta el próximo 14 de julio para el concurso que pretende revitalizar la zona, según un comunicado de la SNC.
Las inscripciones recibidas hasta el momento provienen también, pero en menor medida, de Estados Unidos, Portugal, Italia, México y Bolivia.
La rehabilitación se engloba dentro del Plan Maestro del Centro Histórico de Asunción, un proyecto en el que participan varias instituciones estatales con el objetivo de que el casco antiguo de la capital paraguaya recobre su vigor urbano y se equipare a los de otras ciudades de la región.
En el casco antiguo se concentran los principales tesoros culturales de la ciudad, como la Catedral, el Cabildo o el Palacio de los López, así como todo tipo de instituciones públicas.
Para ello, la SNC lanzó un concurso público buscando las mejores propuestas que sirvan como guía para que el centro se active como un área de recreo, turismo, cultura y lugar de actividades para todos los asuncenos y visitantes.
El equipo ganador del concurso firmará un contrato para desarrollar el Plan Maestro por valor de 100.000 dólares.
Según la Secretaría, el jurado evaluará las propuestas hasta el 10 de agosto, anunciando su veredicto el 12 del mismo mes, por lo que espera que el 15 de agosto se realice la premiación y firma de contrato con el ganador.
La iniciativa quiere revertir una agonía que, según los expertos, se debe fundamentalmente a la pérdida de vecinos, ocasionada por los altos costos impositivos que solo pueden afrontar los Ministerios y las oficinas públicas y privadas.
El resultado es que cada viernes, cuando cesa esa actividad, el entorno en el que se fundó la ciudad, en 1537, se vuelve igual de fúnebre que el Panteón de los Héroes, donde descansan los restos de los próceres del país y uno de los edificios más representativos de ese centro cargado de historia.
Una imagen que salta a la vista cualquier fin de semana: un páramo de actividad comercial y recreativa donde la única vitalidad la proporcionan los cambistas del mercado negro y los indígenas que venden su artesanía.
Fuente: hoy.com.py
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