El negocio de la carne
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Unos 32 kilos de carne bovina anualmente consume un paraguayo, cifra que hoy se convierte en la quinta más importante a nivel mundial, solo por detrás de los guarismos de Uruguay, Argentina, Brasil y Estados Unidos, según considera el último informe del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés).
El asado de los domingos, más el consumo de la proteína roja en milanesas o en los guisos, sigue sosteniendo la posición paraguaya en el ranking, sitio que corrió riesgo a la mitad de la temporada anterior, cuando los precios del producto en el país llegaron a niveles históricos (la carnaza de primera llegó a venderse a G. 40.000 el kilo), que redujeron su demanda a nivel interno.
Hoy, por lejos, Uruguay ocupa el primer lugar, con 62 kilos de consumo por habitante anualmente desplazando a Argentina, que bajó a 54 kilos de consumo y Brasil, con 37 kilos. Ahí cerca, con un escalón por encima de Paraguay, se mantiene Estados Unidos, con 36 kilos de consumo de carne roja per cápita.
En la comparación de precios de los cortes cárnicos entre los países del Mecosur, Paraguay es el que tiene los costos más accesibles, pero hay que tener en cuenta que el costo de vida es menor.
OPORTUNIDADES. El Mercosur está caracterizado por la costumbre del consumo de la proteína roja; pero los consumidores de potencias emergentes están mejorando su poder adquisitivo y repuntan el consumo de carne, como el caso de Rusia, con 17 kilos de consumo anual por persona, China con 3,5 kilos e India, con 3 kilos de consumo per cápita, lo cual señala un futuro prometedor para el negocio en años venideros.
TAMBIÉN MOVILIZA MERCADO LABORAL
La pecuaria moviliza unos 550.000 puestos de trabajo, según datos de la Asociación Rural del Paraguay (ARP).
La discriminación integra a unos 130 mil tenedores de ganado, empleados de estancias, contratistas para obras en estancia, transportistas, servicios, industrias, bancos y financieras y sector sanitario.
En total, el empleo generado por el sector ganadero llega al 17,5% del PEA local, según Censos.
Al darse el escenario aftósico, los más desprotegidos, como los peones, fueron los más afectados, porque quedaron sin trabajo.
Fuente: ultimahora