martes, 12 de junio de 2012

La Senavitat construirá viviendas diseñadas por arquitecto indígena



PROYECTO PARA MEJORAR HÁBITAT

Las primeras casas se edificarán en las comunidades más necesitadas y las mismas se realizarán de acuerdo a la cultura de cada parcialidad.


12/06/2012

 “La idea es respetar los materiales que brinda la naturaleza”, explicó Gerónimo Ayala Benítez, el arquitecto indígena cuyo proyecto “Oga Mbya Guaraní” será llevado adelante por la Secretaría de Vivienda (Senavitat).

“La clave de los guaraníes es la autoconstrucción, así que todos colaboran en la edificación de la vivienda por lo que este proyecto también va a ser una fuente importante de empleo”, comentó tras exhibir un video en el que se puede apreciar la propuesta arquitectónica.

Gerónimo parte del concepto del rancho indígena construido con barro, tacuaras, madera y paja y define como principal en la vivienda “el área libre circundante, que es la zona donde se desarrolla las actividades sociales de la casa y se ubican los locales anexos como los sobrados, bancos/apyka y gallineros y funciona como la sala de estar de la casa propiamente dicha”, explicó durante su exposición de la que participó el titular de Senavitat, Gerardo Rolón Posse.

“Estimo que las primeras viviendas se harán en las comunidades más necesitadas de Jesús”, indicó luego para señalar que se trata de un proyecto que contiene tres tipos de viviendas, de 1, 2 y 3 dormitorios que se desarrollan de acuerdo a la cultura y las necesidades de los pueblos indígenas, una experiencia inédita en el país.

Ayala Benítez es actualmente fiscalizador de obras de la Senavitat. “Soy como un nexo entre los blancos y el mundo indígena”, contó sobre su experiencia laboral. “Trato de mediar entre los contratistas de las obras y los caciques y por suerte siempre podemos llegar a acuerdos”, expuso.

Gerónimo, de 30 años, nació un 3 de setiembre en la ciudad de Coronel Bogado, departamento de Itapúa, ubicada 323 kilómetros al sur de Asunción, dentro de la parcialidad Mbya Guarani, de la comunidad Pindo, bajo las necesidades que habitualmente sufren en muchas de las comunidades nativas.

Cuando cursaba el tercer año de la carrera, trabajó en un estudio de arquitectura, en otras organizaciones no gubernamentales y en la municipalidad de su localidad. Allí desarrolló proyectos en beneficio de los pobladores. Uno de ellos fue la construcción de un local de reunión de los nativos guaraníes de la zona. Otro proyecto fue la construcción de cuatro escuelas.


Fuente: lanación

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