miércoles, 28 de marzo de 2012

Para BCP, construcción es la esperanza económica de 2012


CRECIMIENTO DE 21,1% EN EL 4TO. TRIMESTRE

2011 cerró con crecimiento de 4% del PIB. Los ingresos anuales de cada paraguayo crecieron 28,5%
 
28/03/2012
por Marta García
martagarcia@lanacion.com.py

El sector de las construcciones surge como la gran promesa para la economía paraguaya, en el 2012. El Banco Central del Paraguay (BCP) considera que este segmento reúne las condiciones para contrarrestar los efectos de la caída en la producción agropecuaria en el comportamiento del Producto Interno Bruto (PIB).

Esta posición se basa en el hecho de que las construcciones cerraron el 2011 con muy buenos resultados, especialmente en la segunda mitad del año. Se espera que esta tendencia continúe a lo largo del 2012 y ayude a evitar que la sequía y la fiebre aftosa impacten de manera muy significativa en el dinamismo de la economía.

Según el último informe de Cuentas Nacionales de la banca matriz, este rubro experimentó una expansión de 21,1% en su nivel de producción durante el cuarto trimestre del ejercicio anual, en comparación con mismo periodo del 2010.

Este resultado refleja un pronunciado salto respecto a la variación observada en el tercer trimestre, cuando fue de apenas 2,7%; y revierte las cifras negativas que se registraron en el primer semestre (ver info).

El PIB de Paraguay cerró el 2011 con un incremento de 4%. En el último trimestre, el aumento fue de 3,4%, lo que representa un leve repunte frente al 3,1% registrado en el tercer trimestre. El PIB per cápita (ingresos anuales de cada paraguayo) ascendió a 3.649 dólares, con un crecimiento de 28,5% respecto a los 2.839 dólares correspondientes al 2010.

La actividad del sector de construcciones retomó los índices de crecimiento que se habían visto en el 2010. El director de Cuentas Nacionales, Miguel Mora, explicó que esta reversión en los resultados del sector se relaciona con la solución que encontraron al problema de la escasez de cemento.

CEMENTO IMPORTADO
Aseguró que las facilidades aplicadas a la importación del insumo permitieron impulsar las obras; recordó que las dificultades se basaban únicamente en la oferta y no en la demanda, es decir, que las necesidades de construcciones se mantienen como en años anteriores.

En cuanto a las fuentes de financiamiento, Mora admitió que la falta de fondos en la Agencia Financiera de Desarrollo (AFD) no constituyó un impedimento para que el segmento en cuestión continuara desarrollándose, ya que el sistema financiero privado logró satisfacer el requerimiento de créditos. “Lo que hizo la AFD fue mostrar al sector privado un nicho de mercado interesante y que necesitaba ser impulsado, en este caso las construcciones”, expresó.
 
 

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