El turismo interno en Paraguay creció 170% gracias a la Senatur y al auge económico

El turismo en Paraguay, buen trabajo de un sector en auge

Sábado, 18 de Febrero de 2012

Tradicionalmente, cuando hablamos de los buenos años económicos del Paraguay, hacemos referencia a los temas agrícola y ganadero que, sin duda, han sido los principales motores de nuestra economía.

Últimamente también se han sumado las construcciones, con un desarrollo muy importante, pero pocas veces hacemos referencia a un sector como el turismo que, en los últimos años, ha venido teniendo un sostenido crecimiento, fruto de un trabajo serio y coordinado que vale la pena destacar.

Veamos primero algunos números interesantes. En el año 2011 ingresaron al país unos 520 mil visitantes y otros 2,8 millones fueron excursionistas, llamados así por ser considerados visitantes del día. Todo esto representó un crecimiento del 12% y un ingreso total de 240 millones de dólares.

Un indicador interesante del movimiento interno son los peajes, y en enero de este año la recaudación superó en un 20% a la del año pasado, lo cual demuestra el creciente interés por visitar diferentes regiones de un país hermoso que hoy cuenta con una mejorada infraestructura en muchos lugares.

Anteriormente, era común escuchar el problema del huevo o la gallina en el sector turismo, pues se mencionaba que la gente no hacía turismo interno por la falta de infraestructura adecuada, pero no existía la misma porque la gente no iba. ¿Cómo empezamos a romper ese estancamiento?


Creo que el trabajo institucional de la Senatur (Secretaría Nacional de Turismo) es un buen ejemplo de cómo instituciones sólidas son claves para el desarrollo.


En primer lugar, se contó con una gestión política eficiente de la ministra, quien, basada en su capacidad técnica, logró mantenerse en dos gobiernos sucesivos, construyendo la suficiente autoridad y legitimidad -por los resultados que iba logrando- para conseguir crecientes recursos que le permiten impulsar los planes establecidos, a pesar de ínfimo presupuesto disponible.


En segundo lugar, se tiene también una excelente gestión programática, pues la institución cuenta con un Plan Maestro de Turismo pensado a largo plazo, pero con indicadores y metas concretas que guían las acciones que se vienen implementando.


En tercer lugar, se está logrando asimismo una buena gestión operativa, ya que el Plan Maestro de Turismo se puede bajar a tierra a través de un vínculo efectivo con el sector privado, el que ha percibido que están dadas las condiciones para realizar importantes inversiones y de esa manera promover el desarrollo del sector. También la cooperación internacional y la sociedad civil han contribuido al desarrollo de nuevos destinos, como la Ruta Jesuítica, el Camino Franciscano o la Ruta del Mbaracayú.


Los resultados de esta buena gestión están a la vista y, de hecho, hoy vemos que la demanda de turismo interno -que creció en un impresionante 170 por ciento- ya supera la oferta y esto genera nuevas e importantes inversiones en una dinámica muy positiva y con fuerte potencial de crecimiento.

El BID también acaba de aprobar un crédito importante para el desarrollo de nuevos proyectos e Itaipú está apostando fuerte a todos sus atractivos turísticos, y además apoya el desarrollo del Museo de las Aguas, en Saltos del Guairá, que será de alto nivel.

Un cuello de botella lamentable sigue siendo el tema de nuestros aeropuertos. Y en esto se ha perdido una batalla significativa al anularse el plan de concesiones. Pero debemos seguir insistiendo, pues es una cuestión capital para aprovechar mejor las oportunidades que se nos presentan.


En fin, es positivo ver en nuestro país el desarrollo institucional de una entidad como Senatur y sus efectos que generan riqueza y empleos. Esperemos que las políticas que viene impulsando permanezcan en el largo plazo, independientemente de las personas que la dirijan en el futuro. Y es conveniente también una articulación interinstitucional para mejorar el urbanismo, la restauración de los edificios neoclásicos y la interconexión entre la capital y principales ciudades. Un cuidado de la imagen que proyectamos acrecentará aun más el turismo y nuestro bienestar.